¡Dejen en paz a las embarazadas!

No dejo de recibir vivencias de mujeres embarazadas saturadas, perdidas, y con una gran carga por las expectativas que las miradas de los demás tienen puestas sobre ellas.

Pero...¿Qué cosas decimos que están fuera de lugar cuando hablamos con una embarazada?

Todo aquello que pueda hacerlas sentir mal, que las cuestione como madres, como persona responsable, y todo aquello que implique una expectativa irreal como:

 "¡Disfruta de tu embarazo!"

Yo respondo mucho con:

"¿Y qué tengo que disfrutar exactamente?"

¿Por qué una frase que se dice constantemente y que parece tan indefensa no se debe decir?

Porque no hay dos embarazos iguales, no hay dos mujeres iguales y cada persona vive este proceso vital de formas muy muy distintas.

Otra frase que personalmente me parece una crueldad es: 

"Estás embarazada, no enferma". 

Y yo digo: "o si...".

¿Acaso no te sientes mal y enferma cuando estás con migrañas, dolores musculares, insomnio (en algunos casos extremo), y un largo etc? ¿Qué tenemos que padecer las mujeres para que se reconozca que pasamos por procesos dolorosos, complicados y que en muchos casos nos impide llevar una vida normal? Es cierto que conocemos de donde vienen los síntomas, del embarazo. Pero señoras y señores, el saberlo no minimiza ni los síntomas, ni los dolores; y, en algunos casos, los síntomas y/o dolores no desaparecen hasta que no se da a luz, y esto es muchooo tiempo para alguien que no lo está pasando bien, y que a ésto se le suma que mucha medicación no se puede tomar por estar en estado.

Y si hablamos del desajuste hormonal pues... ¡Ya ni os cuento!

Así que no le digas a una embarazada: 

"¡Es que tienes las hormonas desbordadas!" 

Ya lo sabemos... Y no hace falta que nos lo repitan constantemente. Puedes acompañar en el proceso o irte. No es necesario hacer ver que sabemos qué le pasa a la otra persona constantemente y que además sabemos lo que más le conviene.

Hay una frase muy sencilla, empática y acertada que casi nunca se utiliza y es: 

"¿Cómo puedo ayudarte?"

Debido a toda esta presión a las que estamos sometidas las embarazadas, y en mayor parte por el entorno más cercano, he llegado a oír a mujeres decir: 

"Me siento mal, creo que no estoy preparada" o "a veces siento que soy una floja"

Y estas afirmaciones sí que me toca las entrañas... Así que, mujer embarazada, quiero decirte que no estás sola, que tienes todo el derecho a vivir tu proceso como te de la real gana, que no eres ninguna floja, que nadie tiene derecho a decirte cómo te tienes que sentir, que nadie sabe qué es lo que te conviene mejor que tú misma, y que por desgracia, el mayor problema de las embarazadas es que el entorno no es empático, ni respetuoso.

Quienes me conocen y conocen mi web sabrán que soy muy partidaria de la comunicación respetuosa y asertiva, pero en estos casos, quiero decirles a todas las mujeres que se encuentran viviendo un proceso complicado y que reciben comentarios que no les ayudan a estar mejor: 

"Está permitido mandar a la mierda y no pasa nada"

Que no se malinterprete. Cada persona valorará que repercusión puede tener en su vida ésto, y existen mejores maneras de decir que eso no nos gusta y que no lo aceptamos. Pero que si se nos escapa un "vete a la mierda" de vez en cuando NO PADA NADA ¡Bastante aguantamos ya!

Y si hablamos de las ecografías y de las no tan gratas noticias que pueden dar a las embarazadas pues todavía peor. 

No tenemos suficiente con la preocupación de preguntarnos si todo saldrá bien que, a ésto se le suma los comentarios del entorno: 

 "Es que no tienes que comer tanto azucar", "Es que tienes que comer más...", "Es que tienes que hacer algo de ejercicio..." "Es que no estás haciendo esto o lo otro", "Es mejor esto o es mejor lo otro".

Quienes se creen con la verdad y las respuestas a nuestros males ¿Qué pautas creen que nos dan en los hospitales? ¿Para qué creen que vamos a revisiones? Aquí están los verdaderos profesionales y quienes aconsejarán lo que realmente debemos hacer. Este es un tema más al que las embarazadas nos vamos a enfrentar: 

"Todo el mundo sabe más que tú sobre todo y saben incluso más que los médicos que siguen tu proceso".

Así que, señoras y señores, muérdanse la lengua, no quieran hacer ver que saben más, porque el mensaje que realmente le transmiten a la mujer embarazada es: 

"Es culpa tuya, y no lo estás haciendo bien"

Lo sé, ésta no es la intención, pero cuando hacemos daño, aunque sea de manera no intencionada, lo importante no es la intención si no lo que realmente se consigue ¿No creen?

¿Qué podemos decir en estos casos?

"Entinedo que te preocupe la situación, pero los médicos me dirán exactamente qué tengo que hacer y seguro que será lo mejor. No me ayuda que me hagas ese tipo de comentarios aunque sé que los haces con la mejor de las intenciones. Te agradecería que no lo hicieras más".

Cuidado con los consejos de otras embarazadas o de otras mujeres que ya han dado a luz. 

Como ya he dicho, cada embarazo es muy distinto entre sí, incluso una misma mujer con más de un embarazo puede vivirlos de maneras muy distintas. Hay muchas madres que por el hecho de serlo se creen con el derecho de aconsejarte, de contarte su proceso para, en algunos casos, compararlos y hacerte ver que su proceso fue peor que el tuyo... ¡Con toda la buena intención del mundo! Eso sí. 

Así que ¡Ni puto caso! Cada persona vive su proceso como sabe y puede en cada momento, y cada proceso es ÚNICO, no es comparable uno con otro.

En estos casos, una buena manera de poner límites y de manera asertiva es:

"Sí, supongo que para cada uno sus circunstancias son las más importantes"

Una de las cosas que no quiero pasar por alto es el ámbito laboral. 

Si estás en este punto, todavía no te han dado la baja y estás pasando un embarazo complicado, tampoco estás sola. En el ámbito laboral puede pasarte de todo, tanto contar con personas empáticas que te ayudan, entienden y te respetan, como topar con personas egoístas que en el momento en que no seas capaz de hacer lo que hacías antes ya no les sirvas. Y no te lo dirán, pero lo sabrás porque lo sentirás. Si es éste tu caso, acude a tu médico de cabecera y cuéntale tu situación para que te den la baja cuanto antes, no hay nada mejor como saber irte a tiempo de un lugar tóxico que no te aporta nada. Sé que este es uno de los procesos que cuesta más a personas exigentes como es mi caso. Personalmente, si hubiese estado bien hubiese trabajado hasta mucho más avanzado el embarazo, y dar el paso no fue nada fácil, pero una vez tomado es lo mejor que pude haber hecho.

Así que mujeres embarazadas, pensar en vosotras, en estar no bien porque viviréis vuestros procesos como cada una pueda, sino en estar tranquilas, y si eso implica alejarnos de quien sea o de lo que sea que no nos ayuda o aporta pues...

 ¡Adelante!

Hay una frase que recuerdo constantemente y espero que os ayude: 

"No podemos hacer que los demás sean empáticos y que nos respeten, pero nos podemos respetar nosotras mismas, y una forma de hacerlo es irnos a tiempo de donde sea".